martes, 23 de diciembre de 2008


Hoy tenía ganas de regalarte algo, podía ser cualquier cosa, pero fue esta. En este día extraño de ganas, un poco cansado, pero con la luz y la intensidad que me mueven día a día ahí, un poco resguardada, pero ahí.
Es de esos días, en los que me cuesta sonreir aunque me sobren las sonrisas, de esos días que parece que te pasa algo, pero sabes que no te pasa nada. Es como si la energía se apagara un poco, aunque duermas grandes siestas y descanses toda la tarde, aunque sepas que mañana comienzan unas esperadas ansiadas vacaciones.
Pero aun así, quería regalarte algo...

viernes, 12 de diciembre de 2008

LAS GANAS PARAN EL TIEMPO...

No es algo que haya descubierto ahora, pero cada vez noto más su juego. La mayoría del tiempo en sensación para mí ha pasado muy rápido, me acuerdo de momentos donde se me hizo largo, pero han sido solo momentos, el resto pasó rápido, pasa rápido. Aunque soy consciente que conforme he ido cumpliendo años ha ido acelerándose, a excepción de algunos momentos.
También me he dado cuenta, que algunas veces ha ido tan rápido que un mes me ha parecido un soplo. El caso es que le damos tanta importancia al tiempo, incluso creemos que con nuestro super reloj, y nuestro increíble calendario, lo tenemos contado y controlado, pero creo que va por su cuenta, que nada tiene que ver con los horarios o con los números ordenados en semanas y meses.
Estos días se me están pasando lentos, por las ganas de que llegue un día, aquí viene el tema, que cuando tengo muchas ganas de algo, el tiempo se relentiza, decide recrearse en los días, y esto hace que tenga mas ganas, y cuanto mas ganas mas lento. Me río, me hace gracia la forma que tiene de jugar con nosotros. Es lo mismo que cuanto mas agusto estás mas rápido pasa.
¿Entonces?, si va mas rápido cuanto mas agusto estamos, cuanto mas ganas tenemos que llegue un día, que pueden ser las ansiadas vacaciones por ejemplo, y cuando mas astiados o cansados estamos pasa lento y espeso, eso que quiere decir, que si queremos parar el tiempo es mejor que nos aburramos, nos cansemos, etc,etc.
Ahora me viene a la cabeza, el libro de Milán Kundera, la insoportable levedad del ser. Para mi el peso, son esos momentos o situaciones o etapas de la vida, densas, espesas, donde te encuentras en inmerso en esa sensación de que el tiempo no pasa, y quisieras que pasara rápido, y la levedad, sería esos momentos de estar agusto, momentos esperados con ganas, que cuando llegan el tiempo pasa por ello como estrella fugaz. Sigo riéndome, porque esta vida es increíble, sorprendente e inexplicable, de ahí su belleza, de ahí que sin encarnarnos estemos deseando de hacerlo, de volver a nacer, de volver a sentir son infinitos contraste y opuestos.
A veces me doy cuenta, de lo especial que es vivir, de lo increíble que es el ser humano y de lo tontos que somos mientras hacemos nuestras vidas. Pero son instantes fugaces que nunca producen un pensamiento exacto que explicar, que hacer tuyo, mas bien es como si se me encendiera la luz y se me apagara rápido, y solo puedo decir, eeehhhh, la luuuz, pero ni me quedó el destello, solo la sensación de que por un instante vi algo claro, pero fue tan fugaz que ni me dio tiempo a pensarlo y hacerlo mío.
Hoy creo que es unos de esos días que escribo sin ton ni son, que no tengo ni idea del sentido, y que al mismo tiempo me da igual. Unos de esos días que escribo porque si, sin esperar que salga nada coherente, solo dejo que las palabras caprichosas salgan como quieran.
El tiempo, que cuando queremos pararlo mas rápido pasa, y cuando queremos acelerarlo mas lento corre, sigo riéndome, me gusta ver el poco control que tenemos de lo que realmente es importante, y lo afanados que vivimos por controlarlo, no solo a el, sino a todo lo que nos rodea. Controlamos algo cuando realmente sabemos de ese algo, controlamos un coche cuando sabemos conducirlo, controlamos un bicicleta cuando hemos aprendido a andar en dos ruedas, y controlaremos nuestra vida cuando sepamos realmente que es esta vida. Mientras tan solo jugamos a ser dueños del tiempo, de los días y de nuestro propio existir.
Yo mientras trato de aprender un poco sobre mi y sobre la vida misma, prefiero sonreirle al tiempo guiñarle un ojo, y decirle, eeehhh, que te veeooo, aunque solo sea eso, darme cuenta de sus ritmos, tal vez sea el comienzo de una bellisima amistad... y sigo sonriendo...

miércoles, 10 de diciembre de 2008

SOÑE QUE TE IBAS...

Aun siendo un sueño, que te contaba enredada en besos y abrazos matinales, agradecía despertar y ver que había sido solo eso, que seguías ahí, a mi lado.
Eso me ha hecho que desde que salí de casa esta mañana te haya llevado en el pecho con la intensidad de haberte perdido sin perderte. Y es que no viene mal, recordar que podemos perder lo que tenemos sobre todo si no lo cuidamos, y a veces aun cuidándolo...
Hace tiempo que las palabras se me quedaron cortas para decirte lo que te siento, para explicar lo que es vivir cada día a tu lado, y es que el amor es algo nuevo para mi, aunque haya dicho tantas veces que amé, he de reconocer que soy nueva en esto. Ya lo hemos hablado muchas veces, que va mas lejos que la pasión o el deseo que se vuelve motas de arena en un inmenso desierto. El amor es algo que no se puede explicar llevaba razón quien lo dijo, enmudece y paraliza las definiciones, es algo que tan solo se puede sentir y vivir. Es por eso que llego aquí y me lío en palabras que tan solo son un momento que te regalo porque si, en esta noche de tormenta, esperando que llegues vestida de tu sonrisa de flores para meterme en la ducha contigo y agotar las pocas horas que quedan para que nos metamos en la cama y viva el momento mas reconfortante del día, cuando tu cuerpo se enreda al mio creando esa temperatura de placenta de la que me cuesta tanto parirme cada mañana...
Me voy hasta la próxima, acabas de venir envuelta en tu bufanda y tapada con capucha, canturreando y contándome el frío de la tormenta que fuera adorna esta noche. Me voy corriendo a cogerte, a abrazarte y ver que hacemos de cena...

"EL ESPIRITU DE LA NAVIDAD"

Estamos tan lejos de el, que parece ridículo incluso pensar que existe, o que alguna vez haya existido. Hace mucho que los hombres nos esforzamos por alejarnos de lo natural, de la verdadera vida para mi, tanto que ni tenemos tiempo para tonterías como esta.
Pero yo no puedo engañarme, ni darle la espalda, aunque el tiempo inventado, con su orden y su verdad me atrape hasta incluso olvidar.
Fuera de preceptos y creencias religiosas, fuera de todo el tinglado que hemos montado y que llamamos vida, la naturaleza vital en la que se desarrolla nuestra existencia, sigue su curso la atendamos o no.
Y es ahí donde vive y nos sonríe esta energía que ciclicamente nos visita en estas fechas. Hubo un tiempo tan lejano que ni en nuestra historia existe, donde las almas que venimos a vivir esta vida, cohexistiamos con estas energías naturales, pero en algún momento de nuestro existir las empezamos a deformar.
Así llegamos a nuestros días donde todo se llena de luces, adornos, reuniones familiares a veces por costumbre, a regalos y en definitiva a unas fechas que se han tornado consumistas y vacías, donde la esencia se ha degradado de tal manera, que lo único que reconocemos es una cierta melancolía, o nostalgia, a veces incluso tristeza, que hace que para muchos este tiempo sea ideal para borrarlo del calendario.
Pero es que no podemos no sentirlo, de ahí esa sensación extraña, de ahí ese aire bucólico, o ese algo por dentro que nos hace estar más sensibles.
Porque aunque lo hayamos olvidado, aunque no reparemos en el, aunque no disfrutemos de su magia, esta energía llega cada año, y se instala entre nosotros, para hacer posible lo que en otros momentos costaría mas conseguir. Llega como un puente entre la realidad y los sueños, para cumplirlos.
Le encanta enredarse en las luces, en el olor a castañas asadas, y juega con nuestro pecho haciendo que nos sintamos mas iguales, mas cercanos, menos desconocidos.
Aunque no lo creamos, existe, y ya está llegando, lo noto, y viene para recoger los deseos, para cumplir sueños, así que yo ya tengo preparados los míos. Ya mismo estará instalado durante unos días con nosotros, deseando que lo miremos y le demos la bien venida con la sonrisa del alma... pero cada día estamos mas lejos de lo natural, cada día creemos menos, y esta realidad grotesca que hemos construido como verdadera nos tiene mas y mas atrapados, tanto que el olvido nos está haciendo que perdamos la esencia de la vida...